Desde
tiempos inmemoriales existe la fantasía urbana (porque claramente es una
fantasía que se alimenta de asfalto, caos, ruido y un ritmo desenfrenado) de
“largar todo y poner un bar en la playa”. La fantasía de una vida más tranquila
y de sentirnos dueños de nuestro tiempo y nuestro destino. Pero claro, “largar
todo” no es fácil. Menos cuando uno consiguió un trabajo estable, ciertos
beneficios ganados con esfuerzo y una cantidad de dinero nada despreciable en
el banco cada mes. Ah, la seguridad… esa perra traicionera.
Hay gente
que se anima, gente que decide quemar las naves e ir tras un sueño. Yo siempre
tuve sueños, pude hacer realidad muchos de ellos, otros todavía esperan. Pero nunca,
jamás fui una piromaniaca de embarcaciones. Soy Tauro hasta la médula, necesito
la certeza de que el suelo bajo mis pies es firme. Y aún así aquí estoy; un viernes
como hoy hace tres meses “largué todo”. Profesionalmente,
claro. Lo hice por una idea que nació hace mucho tiempo. Una idea que creció y
se transformó en un sueño.
Para
alguien que hizo de su independencia un culto, dejar la seguridad de un trabajo
y depender de otro es todo un issue. La sensación de vértigo es recurrente. Pero
hicimos un plan. Analizamos diferentes escenarios. Diseñamos un Plan B. Por si
acaso. Nunca se sabe. Y decidimos apostar por el sueño. Nuestro sueño. No
sabemos a dónde nos va a llevar nuestra apuesta. Pero de algo estamos seguros:
este es el momento, esta es nuestra oportunidad, y estamos dispuestos a
arriesgarnos. Si funciona, habremos creado nuevas oportunidades para nosotros y
los que nos rodean. Si no, habremos aprendido toneladas de cosas nuevas. Y lo
intentaremos otra vez.
Haber abandonado
mi zona de confort para hacer algo en lo que creo es un gran “lo hice”. Sin embargo,
mi mejor “lo hice” es la conjugación en primera persona del plural. Porque
decidimos algo juntos. Porque quemamos algunas naves y nos subimos juntos a una
sola embarcación. Porque soñamos juntos. Juntos a la par.
Y? Cómo va?
ResponderEliminarViento en popa? (el chiste fácil es lo mío)
Espero que si, un beso, M.
El barco sigue a flote, los remeros están cansados, han encontrado algunas tormentas bravas en el camino. Pero aún siguen convencidos de que vale la pena seguir adelante!
EliminarEn éxtasis con mi primer comentario :-)!!!
Remen, remen!
ResponderEliminarconcuerdo con marina, Remennnnnnn!
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